No sirve para nada bueno ni noble, sino para pretender que sus miembros no deben sentir vergüenza alguna por sus comportamientos, que no son motivo de escándalo; sino que, más bien, debieran sentirse "orgullosos" de su conducta y proclamarlo a los cuatro vientos. Lo hacen muchos de aquellos que padecen de estas condiciones, alentados y empujados por los "Ideólogos de Género".
Sirve para alentar los fines perversos de la "Ideología de Género", que trata de incrementar el número de "conversos" a sus protervos fines y a que éstos se perpetúen en sus enfermizas inclinaciones, y a que lo hagan mucho más abierta y públicamente. Al mismo tiempo que alientan a que se intensifique y difunda esta condición y sea más tolerada y aceptada.
Para nada bueno ni noble. Sólo para alentar la continuidad y la persistencia de una vida en el error, la enferedad y el pecado; al proporcionar, a estos enfermos, la falsa idea de contar con la aprobabión, y hasta con el aplauso de la comunidad. Una pena y una lástima muy grandes es lo que , en realidad, se merecen estos desventurados.
Pretende engañar a estas pobres personas, dándoles la falsa idea de que no son pocos, sino muchos, y de que cuentan con el apoyo de la comunidad entera. Nada más cruel y perverso que apoyar la persistencia en el error y el pecado; en lugar de ayudarlos a salir de su triste error y confudión.
Una opinión diferente: Para que abramos los ojos y nos demos cuenta de hasta dónde ha caído, moralmente, la humanidad en los últimos años. Ya se perdió toda verguenza, todo decoro y todo pudor. Los aberrantes extremos de la especie humana,, carentes ya de los últimos rezagos de vergüenza, se muestran públicamente, sin que les importe nada, ni ellos, ni sus familias. Y, otros, más perversos, los alientan y empujan a exhibirse así.
No para el bien de las pobres víctimas de estas dolencias, a las que se quiere empujar más en su caída, para que sea muy ostensible, y más evidente, su pobre condición, y su separación y alejamiento de la normalidad; haciéndolos, cada vez más, instrumentos de los miserables predicadores y traficantes de estas pobres gentes, a las que verdaderamente ni aman ni tienen el menor sentimiento de lástima o compasión. Estos son los miserables líderes y traficantes de la llamada "ideología de género".
La perversa "ideología de género", preconizada y hasta impuesta por los mismos organismos internacionales, es la responsable de toda estagravísima crisis moral.
Para nada noble ni bueno. Sólo sirve para hundir más a estos pobres infelices, a los que los canallas, que los incitan a hacer pública su condición, de esta manera los convierten ahora en ostentosos públicos falsamente "orgullosos" de ella, para queles cueste más librarse de ella. Estas "celebraciones", en nada privadas, son el "logro" de los perversos "ideólogos de género", demoniacos propagandistas del mal.
9 comentarios:
No sirve para nada bueno ni noble, sino para pretender que sus miembros no deben sentir vergüenza alguna por sus comportamientos, que no son motivo de escándalo; sino que, más bien, debieran sentirse "orgullosos" de su conducta y proclamarlo a los cuatro vientos. Lo hacen muchos de aquellos que padecen de estas condiciones, alentados y empujados por los "Ideólogos de Género".
Sirve para alentar los fines perversos de la "Ideología de Género", que trata de incrementar el número de "conversos" a sus protervos fines y a que éstos se perpetúen en sus enfermizas inclinaciones, y a que lo hagan mucho más abierta y públicamente. Al mismo tiempo que alientan a que se intensifique y difunda esta condición y sea más tolerada y aceptada.
Para nada bueno ni noble. Sólo para alentar la continuidad y la persistencia de una vida en el error, la enferedad y el pecado; al proporcionar, a estos enfermos, la falsa idea de contar con la aprobabión, y hasta con el aplauso de la comunidad. Una pena y una lástima muy grandes es lo que , en realidad, se merecen estos desventurados.
Pretende engañar a estas pobres personas, dándoles la falsa idea de que no son pocos, sino muchos, y de que cuentan con el apoyo de la comunidad entera. Nada más cruel y perverso que apoyar la persistencia en el error y el pecado; en lugar de ayudarlos a salir de su triste error y confudión.
Una opinión diferente: Para que abramos los ojos y nos demos cuenta de hasta dónde ha caído, moralmente, la humanidad en los últimos años. Ya se perdió toda verguenza, todo decoro y todo pudor. Los aberrantes extremos de la especie humana,, carentes ya de los últimos rezagos de vergüenza, se muestran públicamente, sin que les importe nada, ni ellos, ni sus familias. Y, otros, más perversos, los alientan y empujan a exhibirse así.
No para el bien de las pobres víctimas de estas dolencias, a las que se quiere empujar más en su caída, para que sea muy ostensible, y más evidente, su pobre condición, y su separación y alejamiento de la normalidad; haciéndolos, cada vez más, instrumentos de los miserables predicadores y traficantes de estas pobres gentes, a las que verdaderamente ni aman ni tienen el menor sentimiento de lástima o compasión. Estos son los miserables líderes y traficantes de la llamada "ideología de género".
Si la hipocresía y la falsa solidaridad, se pudieran convertir en verdadera ayuda a estas infelices almas cuanto bien se pudiera lograr.
La perversa "ideología de género", preconizada y hasta impuesta por los mismos organismos internacionales, es la responsable de toda estagravísima crisis moral.
Para nada noble ni bueno. Sólo sirve para hundir más a estos pobres infelices, a los que los canallas, que los incitan a hacer pública su condición, de esta manera los convierten ahora en ostentosos públicos falsamente "orgullosos" de ella, para queles cueste más librarse de ella. Estas "celebraciones", en nada privadas, son el "logro" de los perversos "ideólogos de género", demoniacos propagandistas del mal.
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