La ceguera, falta de ponderación y de espíritu de justicia, y el más abyecto totalitarismo, hoy impregnan el accionar de los neomarxistas, inbuídos de los más errados y perversos feminismo y homosexualidad (con todas sus tristes variantes). Tenemos que darnos cuenta que lo que está pasando ya en otros paísis, la misma clase de perturbadas personas, puestas en el poder sin una verdadera legitimidad, entre nosotros, solapada o abiertamente, llevan años tratando de hacer lo mismo. ¡Abramos los ojos de una vez!
1 comentario:
La ceguera, falta de ponderación y de espíritu de justicia, y el más abyecto totalitarismo, hoy impregnan el accionar de los neomarxistas, inbuídos de los más errados y perversos feminismo y homosexualidad (con todas sus tristes variantes). Tenemos que darnos cuenta que lo que está pasando ya en otros paísis, la misma clase de perturbadas personas, puestas en el poder sin una verdadera legitimidad, entre nosotros, solapada o abiertamente, llevan años tratando de hacer lo mismo. ¡Abramos los ojos de una vez!
Publicar un comentario