Francisco presidió la Vigilia pascual en la Basílica de San Pedro y bautizó a 8 catecúmenos. En su homilía aseguró que "celebrar la Pascua, es volver a creer que Dios irrumpe y no deja de irrumpir en nuestras historias" desafiando nuestros "conformantes" y paralizadores determinismos. Celebrar la Pascua es que Jesús venza esa pusilánime actitud que tantas veces nos rodea e intenta sepultar todo tipo de esperanza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario