Da verguenza ajena el contemplar como un político nuestro, en medio de una crisis tan grave (sanitaria, económica y social) pueda tan impávidamente, ofreccer una lista interminable de promesas que le son imposibles de cumplir, porque nada pudo cumplir en tres años de fracaso completo y mucho menos hará en los meses restantes. Lo mejor que podría haber hecho era convocar a las más prontas y ordenadas elecciones, sin meter la mano en querer cambiar tanto al Congreso como a las nromas electorales: sólo para peor.
El estrepitosamente fracasado presidente Vizcarra no tuvo ningún embarazo en prometer mil y un proyecto maravillosos para el Perú, para "cumplirse" en los escasos meses que le quedan de gobierno (si él, sus parientes, sus paisanos y amigos respetan las reglas de juego democrático), y que no cumplirá, al igual que no hizo nada bueno en el aciago tiempo en que el país lo tuvo que padecer.
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Da verguenza ajena el contemplar como un político nuestro, en medio de una crisis tan grave (sanitaria, económica y social) pueda tan impávidamente, ofreccer una lista interminable de promesas que le son imposibles de cumplir, porque nada pudo cumplir en tres años de fracaso completo y mucho menos hará en los meses restantes. Lo mejor que podría haber hecho era convocar a las más prontas y ordenadas elecciones, sin meter la mano en querer cambiar tanto al Congreso como a las nromas electorales: sólo para peor.
El estrepitosamente fracasado presidente Vizcarra no tuvo ningún embarazo en prometer mil y un proyecto maravillosos para el Perú, para "cumplirse" en los escasos meses que le quedan de gobierno (si él, sus parientes, sus paisanos y amigos respetan las reglas de juego democrático), y que no cumplirá, al igual que no hizo nada bueno en el aciago tiempo en que el país lo tuvo que padecer.
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