Las pruebas sobre la inconducta ética, y de todas las trapacerías de Vizcarra son cada vez más numerosas y contundentes. En cualquier lugar civilizado del planeta, serían más que suficientes para separarlo de un cargo que requiera un mínimo de decoro y honestidad, para no mencionar competencia. Pero eso no es lo que ocueee en el Perú. ¿qué ejemplo se da a nuestras gentes?
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Las pruebas sobre la inconducta ética, y de todas las trapacerías de Vizcarra son cada vez más numerosas y contundentes. En cualquier lugar civilizado del planeta, serían más que suficientes para separarlo de un cargo que requiera un mínimo de decoro y honestidad, para no mencionar competencia. Pero eso no es lo que ocueee en el Perú. ¿qué ejemplo se da a nuestras gentes?
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