¿Qué le pasó al pobre Zelensky?, ¿Se le tratstornó el juicio por la guerra de conquista que la Rusia de Putin le declaró?, o quizá - y más probable - ¿Las grandes potencias occidentales, o algunas de ellas, como los Estados Unidos, el Reino Unido, o la Francia que olvidó a De Gaulle, lo están presionando para que renuncie a sus principios sobre la familia, para que también se una a los siervos del poder LGTB+ a cambio de la ayuda militar?. Y, quizá espera con su mayor confianza, en que el Primer Ministro le responda con un rotundo "jamás", porque así lo tiene establecido la Constitución del país, y que este no es el momento para estas vergonzosas cuestiones, cuando se juega la misma existencia de su patria y muchos de sus ciudadanos están inmolando sus vidas por defender una nación independiente fiel a sus principios y su religión.
Quizá esta sólo sea una respuesta dilatoria, para evitar dar un rotundo e innmediato ¡NO! a los pedidos y presiones de los líderes de las que hasta hace poco fueron naciones líderes de la civilización occidental y cristiana. Y porque, en plena desesperada guerra defensiva contra un muy poderoso agresor, este no es momento para complacer a un puñado de enfermos, por decir lo menos, que aspiran a cambiar su Constitución nacional en lo que toca a la familia.
Ninguna persona sensata quisiera que, en este siglo, Putín aparezca como el "cruzado cristiano" liberador de Ucrania, para comenzar, y luego continuar con el resto del mundo.
Sería muy lamentable el que pudiera ser cierto que los países que fueron los pilares de la Civilizació Occidental y Cristiana, y hoy de la Unión Europea, estuvieren - movidos por la Ideología de Género y todas sus perversidades - poniendo como una condición para ayudar a Ucrania a defenderse del inmoral e injustificable ataque de la Rusia de Putin, a no negarse a explorar alguna posibilidad de tolerar las aspiraciones homosexuales. Es de desear que una respuesta negativa no acarree el abandono, o la mengua, de la asistencia en material de guerra a la barrera protectora que para ellos es Ucrania.
Recordar que meses antes que comience la guerra, Hungría y Polonia sufrían críticas porque no siguen las ideologías de género ni abortiva, enfrentamientos con la Unión Europea con retención de fondos.
6 comentarios:
¿Qué le pasó al pobre Zelensky?, ¿Se le tratstornó el juicio por la guerra de conquista que la Rusia de Putin le declaró?, o quizá - y más probable - ¿Las grandes potencias occidentales, o algunas de ellas, como los Estados Unidos, el Reino Unido, o la Francia que olvidó a De Gaulle, lo están presionando para que renuncie a sus principios sobre la familia, para que también se una a los siervos del poder LGTB+ a cambio de la ayuda militar?. Y, quizá espera con su mayor confianza, en que el Primer Ministro le responda con un rotundo "jamás", porque así lo tiene establecido la Constitución del país, y que este no es el momento para estas vergonzosas cuestiones, cuando se juega la misma existencia de su patria y muchos de sus ciudadanos están inmolando sus vidas por defender
una nación independiente fiel a sus principios y su religión.
Quizá esta sólo sea una respuesta dilatoria, para evitar dar un rotundo e innmediato ¡NO! a los pedidos y presiones de los líderes de las que hasta hace poco fueron naciones líderes de la civilización occidental y cristiana. Y porque, en plena desesperada guerra defensiva contra un muy poderoso agresor, este no es momento para complacer a un puñado de enfermos, por decir lo menos, que aspiran a cambiar su Constitución nacional en lo que toca a la familia.
Ninguna persona sensata quisiera que, en este siglo, Putín aparezca como el "cruzado cristiano" liberador de Ucrania, para comenzar, y luego continuar con el resto del mundo.
Quizás lo hace porque se lo piden para ingresar a la Unión Europea. Que él esté de acuerdo, puede ser.
Sería muy lamentable el que pudiera ser cierto que los países que fueron los pilares de la Civilizació Occidental y Cristiana, y hoy de la Unión Europea, estuvieren - movidos por la Ideología de Género y todas sus perversidades - poniendo como una condición para ayudar a Ucrania a defenderse del inmoral e injustificable ataque de la Rusia de Putin, a no negarse a explorar alguna posibilidad de tolerar las aspiraciones homosexuales. Es de desear que una respuesta negativa no acarree el abandono, o la mengua, de la asistencia en material de guerra a la barrera protectora que para ellos es Ucrania.
Recordar que meses antes que comience la guerra, Hungría y Polonia sufrían críticas porque no siguen las ideologías de género ni abortiva, enfrentamientos con la Unión Europea con retención de fondos.
Publicar un comentario