Las enfermedades, y sus epidemias, no terminan por decisiones de autoridades, sean nacionales o internacionales. Ha disminuido enormemente la pandemia del Covid-19, pero todavía muere en el mundo, por ella, una persona cada tres minutos, y muchos más se enferman y se hospitalizan. Las poblaciones tienden a ser poco cuidadosas, y ciertas informaciones, pueden - sin quererlo - alentar este comportamiento.
El fin de lA EMERGENCIA SANITARIAo no significa el fin del coronavirus. Este permanece y, seguramente, permanecerá quizá indefinidamente entre nosotros. Los enfermo, y hasta muertos, por Covid-19 siguen presentándose diariamente en el mundo.
Se decidió dejar la emergencia, porque durante más de un año, la pandemia ha seguido una tendencia descendente, con un aumento de la inmunidad de la población por la vacunación y la infección, una disminución de la mortalidad y una reducción de la presión sobre los sistemas sanitarios.
El COVID 19 está aquí para quedarse. Seguirá matando y seguirá cambiando porque existe el riesgo de que aparezcan nuevas variantes. No se debe bajar la guardia.
3 comentarios:
Las enfermedades, y sus epidemias, no terminan por decisiones de autoridades, sean nacionales o internacionales. Ha disminuido enormemente la pandemia del Covid-19, pero todavía muere en el mundo, por ella, una persona cada tres minutos, y muchos más se enferman y se hospitalizan. Las poblaciones tienden a ser poco cuidadosas, y ciertas informaciones, pueden - sin quererlo - alentar este comportamiento.
El fin de lA EMERGENCIA SANITARIAo no significa el fin del coronavirus. Este permanece y, seguramente, permanecerá quizá indefinidamente entre nosotros. Los enfermo, y hasta muertos, por Covid-19 siguen presentándose diariamente en el mundo.
Se decidió dejar la emergencia, porque durante más de un año, la pandemia ha seguido una tendencia descendente, con un aumento de la inmunidad de la población por la vacunación y la infección, una disminución de la mortalidad y una reducción de la presión sobre los sistemas sanitarios.
El COVID 19 está aquí para quedarse. Seguirá matando y seguirá cambiando porque existe el riesgo de que aparezcan nuevas variantes. No se debe bajar la guardia.
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