La inacción, la incapacidad y la corrupción gubernamentales, particularmente durante los últimos gobiernos y el actual, fueron sorprendidas por esta plaga internacional. En nuestro país ha sido un verdadero tsunami arrasador de la salud, la vida, y la economía, trayendo una pobreza no vista en muchos años y una crisis que tomará años para recuperarnos en algo. No debíamos haber sido sorprendidos en esta forma y con tanta severidad. No debiéramos volver a tener gobiernos tan incapaces y corruptos; habiendo tantos peruanos honestos, nobles y competentes; ¿por qué nos gobiernan sólo los pillos e incompetentes?
La pandemia no sólo causa una condición de enfermedad muy grave, causando el colapso total de los sistemas hospitalarios, quedando muchos enfermos sin posibilidad de conseguir una hospitalización necesaria, sino una mortandad capaz de rebasar la capacidad de los cementerios; pero eso no ha sido todo, también ha acarreado una crisis social, laboral (desempleo) y económica sin precedentes en países como el Perú. Esto va a requerir trabajo y competencia gubernamentales muy serias y prolongadas para repararlas.
Las naciones debieran aprender de las pruebas que la Historia les ha hecho pasar. Y el Perú ha tenido no pocas graves o muy graves; pero nuestros pobres gobernantes no parecen haber aprendido, pues parecen ni conocer la Historia.
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La inacción, la incapacidad y la corrupción gubernamentales, particularmente durante los últimos gobiernos y el actual, fueron sorprendidas por esta plaga internacional. En nuestro país ha sido un verdadero tsunami arrasador de la salud, la vida, y la economía, trayendo una pobreza no vista en muchos años y una crisis que tomará años para recuperarnos en algo. No debíamos haber sido sorprendidos en esta forma y con tanta severidad. No debiéramos volver a tener gobiernos tan incapaces y corruptos; habiendo tantos peruanos honestos, nobles y competentes; ¿por qué nos gobiernan sólo los pillos e incompetentes?
La pandemia no sólo causa una condición de enfermedad muy grave, causando el colapso total de los sistemas hospitalarios, quedando muchos enfermos sin posibilidad de conseguir una hospitalización necesaria, sino una mortandad capaz de rebasar la capacidad de los cementerios; pero eso no ha sido todo, también ha acarreado una crisis social, laboral (desempleo) y económica sin precedentes en países como el Perú. Esto va a requerir trabajo y competencia gubernamentales muy serias y prolongadas para repararlas.
Las naciones debieran aprender de las pruebas que la Historia les ha hecho pasar. Y el Perú ha tenido no pocas graves o muy graves; pero nuestros pobres gobernantes no parecen haber aprendido, pues parecen ni conocer la Historia.
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