Llama la atención los cambios mayores quer, a lo largo de los últimos50 años han ido ocurriendo en los dos más grandes y poderosos partidos políticos norteamericanos. Muientras que habían parecido casi similares, salvo que en Republicano parecía haber más miembros económicamente poderosos y protestantes , mientras que el Demócrata parecía existir menos riqueza y más apertura a no protestantes (J. F. Kennedy fué el primer Presidente católico del país, como dice serlo el actual), Y, en tiempos recientes, las cosas han ido cambiando hasta el punto que los Republicanos parecen mucho más pegados a lo que podría ser un tradicionalismo cristiano y moral (conforme a civilización occidental tradicional); y los Demócratas parecen seguir las tendencias "modernistas" sobre sexo (o "género"), familia y matrimoni, aborto, etc. íahoy en día, casi pagr
Kennedy era católico pero tenía su amante. Bill Clinton es de la Iglesia Metodista, tenía amantes y está en la lista de visitantes de la isla de Epstein; su esposa, igual, apoyada por Planned Parenthood. Biden, católico, firmó la ley del matrimonio homosexual en EE. UU.
En realidad, hay que reconocer que una cosa es ser un católico practicante, y otra es sólo llamarse católico para parecerlo y ganar votos de la población católica. Esto ha sucedido mucho tiempo con ciertos miembros muy importantes en el Partido Demócrata, que en los cargos más altos del poder político han apoyado medidas anticatólicas, sobre todo en los años recientes. Por ello, los verdaderos católicos deben diferenciar a sus candidatos por sus conductas reales y sus obras, no por sólo las apariencias y las palabras; Biden es un falso católico, dice serlo, asiste a Misa y pretende comulgar, pero apoya el matrimonio homosexual, la ideologí lgbti+ Y EL ABORTO.
El partido Demócrata, durante muchos años, buscó atraer los votos católicos, y fue seguido por tener candidatos que se llamaran católicos, como el propio Biden, aunque no lo fueran seriamente. Hoy hostilizan a los católicos serios y de serias convicciones en temas como la defensa de la vida (contra el aborto, p. ej.), su rechazo a la ideología "de género", el llamado "matrimonio homosexual",etc.
5 comentarios:
Llama la atención los cambios mayores quer, a lo largo de los últimos50 años han ido ocurriendo en los dos más grandes y poderosos partidos políticos norteamericanos. Muientras que habían parecido casi similares, salvo que en Republicano parecía haber más miembros económicamente poderosos y protestantes , mientras que el Demócrata parecía existir menos riqueza y más apertura a no
protestantes (J. F. Kennedy fué el primer Presidente católico del país, como dice serlo el actual), Y, en tiempos recientes, las cosas han ido cambiando hasta el punto que los Republicanos parecen mucho más pegados a lo que podría ser un tradicionalismo cristiano y moral (conforme a civilización occidental tradicional); y los Demócratas parecen seguir las tendencias "modernistas" sobre sexo (o "género"), familia y matrimoni, aborto, etc.
íahoy en día, casi pagr
Kennedy era católico pero tenía su amante. Bill Clinton es de la Iglesia Metodista, tenía amantes y está en la lista de visitantes de la isla de Epstein; su esposa, igual, apoyada por Planned Parenthood. Biden, católico, firmó la ley del matrimonio homosexual en EE. UU.
En realidad, hay que reconocer que una cosa es ser un católico practicante, y otra es sólo llamarse católico para parecerlo y ganar votos de la población católica. Esto ha sucedido mucho tiempo con ciertos miembros muy importantes en el Partido Demócrata, que en los cargos más altos del poder político han apoyado medidas anticatólicas, sobre todo en los años recientes. Por ello, los verdaderos católicos deben diferenciar a sus candidatos por sus conductas reales y sus obras, no por sólo las apariencias y las palabras; Biden es un falso católico, dice serlo, asiste a Misa y pretende comulgar, pero apoya el matrimonio homosexual, la ideologí lgbti+ Y EL ABORTO.
El partido Demócrata, durante muchos años, buscó atraer los votos católicos, y fue seguido por tener candidatos que se llamaran católicos, como el propio Biden, aunque no lo fueran seriamente. Hoy hostilizan a los católicos serios y de serias convicciones en temas como la defensa de la vida (contra el aborto, p. ej.), su rechazo a la ideología "de género", el llamado "matrimonio homosexual",etc.
Pues parece que el Partido Demócrata no quiere a los católicos verdaderos.
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