Debiéramos celebrar unas verdadersa Navidades, de no sólo las luces, las tiendas, los regalos, los árboles navideños, sino de las almas y de lo que la llegada de Jesús trajo a la humanidad.
La cristiandad toda debiera vivir este tiempo de Adviento y la llegada de la Navidad , imbuída del espíritu de paz que debe corresponder al propio de la llagada del mismo Hijo de Dios para cambiar el destino y la historia de la humanidad.
Es apreciable el tratar de recordarnos villancicos navideños clásicos. No los debiéramos olvidar, porque son parte de nuestra tradición y cultura propias.
Muy agradecidos por recordarnos hermosos villancicos, que ya no se suele escuchar entre nosotros. Su importancia está, no sólo en que , no sólo son parte de nuestro patrimonio cristiano y cultural, sino en que - además - son muy bellos (tanto o más que los de otros pueblos.
5 comentarios:
El mundo verdaderamente debiera celebrar, en la única forma en que es debido, la fiesta del Nacimiento de Jesús.
Debiéramos celebrar unas verdadersa Navidades, de no sólo las luces, las tiendas, los regalos, los árboles navideños, sino de las almas y de lo que la llegada de Jesús trajo a la humanidad.
La cristiandad toda debiera vivir este tiempo de Adviento y la llegada de la Navidad , imbuída del espíritu de paz que debe corresponder al propio de la llagada del mismo Hijo de Dios para cambiar el destino y la historia de la humanidad.
Es apreciable el tratar de recordarnos villancicos navideños clásicos. No los debiéramos olvidar, porque son parte de nuestra tradición y cultura propias.
Muy agradecidos por recordarnos hermosos villancicos, que ya no se suele escuchar entre nosotros. Su importancia está, no sólo en que , no sólo son parte de nuestro patrimonio cristiano y cultural, sino en que - además - son muy bellos (tanto o más que los de otros pueblos.
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