Correcto y muy bien por la mayoría de jueces que votó en favor de la libertad de decisión paterna en defensa de sus hijos. Pero, mal por aquellos 3 votos que querían obligar a los padres a que se sometieran, al igual que sus hijos, a la abusiva y criminal imposición de la educación LGBTI+.
Opino que este resultado nos debiera obligar a reflexionar. Tres de los jueces querían obligar qa todos los padres (y sus niños) a someterse a la educación LGBTI+ y hasta a aceptar los errores y perversiones que se les quiere enseñar. Los que votaron en contra, no lo hicieron necesariamente contra la ideología LGBTI+ (no lo sabemos), sino en favor de la libertad de los padres a elegir lo que les pareciera mejor para sus hijos.
La decisión de esta Corte Suprema, debiera haber resuelto que los niños hijos de los padres que deasaprueban la ideología LGBTI+, debieran contar con la opción de una educación opuestaa a la ideología cuestionada por sus padres.
La Corte Suprema Norteamericana falló, no contra la educación escolar LGTB, sino sólo contra la obligatiedad de ella, y en favor de dejar esta decisión en manos de los padres de cada familia. Por ello, no me satisface completamente su fallo.
4 comentarios:
Correcto y muy bien por la mayoría de jueces que votó en favor de la libertad de decisión paterna en defensa de sus hijos. Pero, mal por aquellos 3 votos que querían obligar a los padres a que se sometieran, al igual que sus hijos, a la abusiva y criminal imposición de la educación LGBTI+.
Opino que este resultado nos debiera obligar a reflexionar. Tres de los jueces querían obligar qa todos los padres (y sus niños) a someterse a la educación LGBTI+ y hasta a aceptar los errores y perversiones que se les quiere enseñar. Los que votaron en contra, no lo hicieron necesariamente contra la ideología LGBTI+ (no lo sabemos), sino en favor de la libertad de los padres a elegir lo que les pareciera mejor para sus hijos.
La decisión de esta Corte Suprema, debiera haber resuelto que los niños hijos de los padres que deasaprueban la ideología LGBTI+, debieran contar con la opción de una educación opuestaa a la ideología cuestionada por sus padres.
La Corte Suprema Norteamericana falló, no contra la educación escolar LGTB, sino sólo contra la obligatiedad de ella, y en favor de dejar esta decisión en manos de los padres de cada familia. Por ello, no me satisface completamente su fallo.
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